Huracán elimina a Independiente por penales y avanza a la final del Apertura argentino
Huracán quedó a un partido de ganar su primer título de Liga argentina desde 1973.
El “Globo”, con el arquero nacionalizado ecuatoriano Hernán Galíndez como héroe, se impuso 6-5 en la tanda de penales ante Independiente en Avellaneda el sábado y sacó pasaporte a la final del Torneo Apertura.
El partido disputado en el estadio Libertadores de América Ricardo Enrique Bochini había terminado igualado sin goles.
El conjunto de Frank Kudelka espera ahora por el ganador de la segunda semifinal que animarán el domingo San Lorenzo de Almagro y Platense, en el estadio Nuevo Gasómetro.
De vencer el “Ciclón”, por primera vez en la historia el clásico de barrio más importante de Argentina, entre Huracán y San Lorenzo, servirá para dirimir un título.
La final se disputará el domingo 1 de junio en el estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero.
Tras una igualdad 4-4 en la tanda de cinco penales, Huracán logró imponerse en la segunda serie de uno, cuando Galíndez se arrojó a su izquierda y contuvo el remate del zurdo Santiago Hidalgo.
Para el “Globo” convirtieron Leonardo Sequeira, Tomás Guidara, Marco Pellegrino, el estadounidense Matko Miljevic, Fabio Pereyra y Walter Mazzantti. En tanto, el arquero local Rodrigo Rey contuvo el disparo de Leonardo Gil.
Por el “Rojo” marcaron desde los 12 pasos Santiago Montiel, los chilenos Pablo Galdames y Felipe Loyola, Kevin Lomónaco y el colombiano Álvaro Angulo.
El paraguayo Gabriel Ávalos estrelló el primer penal de la noche en el travesaño y Galíndez frustró a Hidalgo en el penal decisivo.
“Hay que valorar el esfuerzo de haber llegado a la final. Huracán tiene unión, entrega, compromiso, todos somos importantes, somos una familia. Aquí nadie gana nada solo. Hoy hicimos historia”, declaró el arquero de la selección de Ecuador, emblema de un equipo que el año pasado ya había llegado a la última fecha de la Liga con posibilidades de ser campeón.
Por su parte, el técnico de Independiente, Julio Vaccari, afirmó: “Llegaré a mi casa y me pondré a llorar un rato. La tristeza es muy grande, los jugadores están muy golpeados, pero tienen que estar con la cabeza en alto. Han levantado una institución. Siento un orgullo muy grande”.
Huracán, con disciplina y orden, desactivó el juego del anfitrión durante casi todo el primer tiempo. Parado para la contra, el “Globo” forzó un par de buenas intervenciones de Rey.
El complemento arrancó con todo y en apenas 15 minutos hubo situaciones más claras que en los primeros 45: Rey negó el grito de gol de Miljevic y Galíndez hizo lo propio con Matías Giménez.
En un segundo tiempo con más dinámica y menos interrupciones, el equipo de Vaccari atacó con determinación en busca del pasaporte. El conjunto de Kudelka siguió agazapado, a la caza de una contra que le diera la victoria.
El partido no merecía terminar sin festejos, pero ambos arqueros -con mención especial a Rey- hicieron lo indispensable para que el cero sobreviviera. Además, el chileno Luciano Cabral en el local y Mikjevic en la visita fallaron sendos remates desde posiciones inmejorables.
Entonces llegó el drama de los penales. Y Huracán festejó por sentirse tan cerca de un logro por el que sus hinchas aguardan desde hace 52 años (el mítico equipo dirigido por César Menotti, campeón del Metropolitano 1973).
Independiente venía de eliminar a Boca Juniors y Huracán a Rosario Central, ambos de visitante.
Previamente, el martes, el “Globo” deberá sacar un resultado positivo en casa frente al Corinthians para adueñarse definitivamente del primer lugar de su grupo en la Copa Sudamericana.
Sentenciada la historia en Avellaneda, los simpatizantes de Independiente reconocieron a sus jugadores con un cerrado aplauso, aunque deberán seguir esperando por un título local que les es esquivo desde el ya lejano 2002.