Evo Morales vuelve a cargar contra Luis Arce y asegura que Bolivia está en quiebra

El expresidente de Bolivia Evo Morales durante una reunión con simpatizantes, el viernes 22 de noviembre de 2024, en Lauca N, en la región de Chapare, Bolivia. (AP Foto/Juan Karita, Archivo)

El expresidente de Bolivia Evo Morales durante una reunión con simpatizantes, el viernes 22 de noviembre de 2024, en Lauca N, en la región de Chapare, Bolivia. (AP Foto/Juan Karita, Archivo)

LA PAZ, Bolivia (AP) — El expresidente boliviano Evo Morales arremetió nuevamente el domingo contra su sucesor y ahora enemigo político, el mandatario Luis Arce, asegurando públicamente que el “Estado boliviano está en quiebra” al apelar a créditos para la compra de combustibles cuya escasez se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para el gobierno.

“Si el Estado no estuviera en quiebra no haría falta plata para comprar combustible, más bien sobraría. Esa es la mejor prueba de que el Estado está en quiebra. Depender de la deuda externa para comprar gasolina y diésel es de un Estado mendigo y limosnero”, declaró Morales en su programa de radio dominical desde la zona cocalera del Chapare, en el centro de Bolivia, donde está atrincherado desde que se inició una investigación penal en su contra por el presunto abuso de una menor de edad cuando era mandatario (2006-2019).

Las críticas del político de 66 años se producen en momentos en que Arce enfrenta el peor momento de su gobierno debido a la escasez de diésel y gasolina que afectan a la producción y el transporte en el país, y ha disparado el precio de los alimentos. Esta semana se tienen programadas nuevas manifestaciones en todo el territorio en protesta contra de la escasez y el coste de vida.

Arce explicó que los créditos —pendientes de aprobación legislativa— no son para comprar combustible, pero reconoció que ayudarán a crear “liquidez de divisas”. Añadió que el problema se origina de la falta de dólares para importar, ante lo cual anunció medidas para “paliar” la escasez, incluidas modificaciones en la jornada laboral y la reducción en el consumo de combustibles en el parque automotor estatal.

El mandatario acusa a Morales de un “boicot” económico desde la Asamblea Legislativa, la cual mantiene congelada la aprobación de créditos externos por más de 1.600 millones de dólares.

“La Asamblea Legislativa tiene que aprobar créditos para inversión pública, no para el gasto público, no para comprar gasolina”, dijo Morales. Tras la fractura del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), Arce ha perdido la mayoría legislativa, la cual ahora está en manos de los legisladores leales a Morales y los opositores.

El gobierno subvenciona los combustibles, importa el 82% del diésel y la mitad de la gasolina debido a una baja producción por falta de inversiones. Según las autoridades, se requieren 60 millones de dólares a la semana para importar combustibles, el cual se adquiere al precio internacional y se vende a la mitad del costo.

El MAS, que ha gobernado por casi dos décadas, corre el riesgo de perder su hegemonía política debido a las disputas entre Arce y Morales por el control del aparato partidario de cara a las elecciones presidenciales de agosto. Morales quedó inhabilitado para postularse a la presidencia y un fallo le quitó la dirección del MAS, mientras que Arce marcha a la zaga en las primeras encuestas de intención de voto.