China dice evaluar propuestas de EEUU para conversaciones comerciales, pero aranceles lo dificultan
Contenedores de carga se encuentran listos para ser transportados el 17 de abril de 2025 en el puerto de Guangzhou, distrito de Nansha, en la provincia de Guangdong en el sur de China. (AP Foto/Ng Han Guan, archivo)
El Ministerio de Comercio de China dijo el viernes que Beijing está evaluando múltiples enfoques del gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para conversaciones comerciales, pero que los elevados aranceles impuestos por Washington deben desaparecer.
En un comunicado, el ministerio reiteró la postura de China de que está abierta a dialogar, pero también a luchar si es necesario. Los aranceles unilaterales de hasta el 145% siguen siendo un obstáculo y socavan la confianza, agregó.
“Las guerras arancelarias y comerciales fueron iniciadas unilateralmente por Estados Unidos. Si la parte estadounidense quiere hablar, debe mostrar su sinceridad y estar lista para tomar medidas en temas como corregir prácticas erróneas y cancelar la imposición unilateral de aranceles”, afirmó.
El comunicado citó a un portavoz del ministerio no identificado, quien habría dicho que Beijing tomó nota de varias declaraciones de altos funcionarios estadounidenses que indicaban una disposición a negociar sobre los aranceles.
“Al mismo tiempo, Estados Unidos ha tomado recientemente la iniciativa de transmitir información a la parte china en varias ocasiones a través de partes relevantes, con la esperanza de hablar con la parte china. En este sentido, la parte china está realizando una evaluación”, señaló la nota.
Pero enfatizó que Beijing consideraría que, si no hay un cambio en las drásticas subidas de los aranceles ordenadas por Trump, los intentos por dialogar carecen de sinceridad.
“Decir una cosa pero hacer otra, o incluso intentar participar en coerción y chantaje bajo la apariencia de conversaciones, no funcionará con la parte china”, afirmó.
China se encuentra en un feriado y las oficinas gubernamentales están cerradas. Sin embargo, la bolsa de Hong Kong subió un 1,7% en las primeras cotizaciones del viernes, mientras que el índice de referencia de Taiwán ganó un 2,2%. Los futuros de Estados Unidos también avanzaron.
El viernes termina la exención arancelaria de la Casa Blanca para importaciones de bajo valor desde China. Eso significará precios más altos y retrasos en las entregas cuando el gobierno comience a recaudar impuestos en cada envío.
Beijing ha respondido a los aumentos arancelarios de Trump elevando sus propios gravámenes sobre las importaciones estadounidenses hasta en un 125%. También ha endurecido las restricciones a las exportaciones a Estados Unidos de ciertos minerales estratégicamente importantes y ha dejado de importar una amplia gama de productos agrícolas estadounidenses.
Al mismo tiempo, China ha tratado de unirse a otros países para construir un frente unido contra Trump mientras intensifica sus propias contramedidas al impacto de los aranceles.
Trump ha decretado un impuesto de importación global del 10% para intentar obligar a los fabricantes a trasladar fábricas de vuelta a Estados Unidos. Ordenó aranceles “recíprocos” de dos dígitos para muchos países, pero luego pospuso su aplicación por 90 días para dar tiempo para negociaciones. También ha gravado el acero, el aluminio y los automóviles extranjeros.
Las medidas más duras se reservaron para China, el mayor exportador y la segunda economía más grande del mundo.
Sus anuncios de subidas arancelarias, suspensiones y nuevos aranceles han dejado a empresas, inversores y consumidores perplejos sobre lo que está por venir, lo que ha afectado a la confianza del consumidor.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, quien lidera la estrategia de la Casa Blanca hacia China, afirmó que espera que Beijing llame porque los aranceles no son sostenibles.
En una entrevista el jueves con Fox Business, Bessent señaló que el principal problema con China no eran los aranceles altos sino otras barreras.
“Hay toda una serie de comportamientos incorrectos por parte de los chinos”, dijo Bessent, mencionando el robo de propiedad intelectual como marcas registradas y la ciberpiratería.
“Así que todo está sobre la mesa en lo que respecta a la relación económica”, añadió. “Estoy seguro de que los chinos querrán llegar a un acuerdo”.
Pero Beijing ha mostrado poca disposición a comprometerse. Su Ministerio de Exteriores publicó esta semana un estridente video en redes sociales en el que se afirmaba que Estados Unidos ha “desatado una tormenta arancelaria global”.
Además, prometió que China no “se arrodillará" en la guerra comercial.
“Arrodillarse solo invita a más acoso”, dijo.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.