EEUU parece haber comenzado a deportar migrantes a Sudán del Sur, señalan abogados

Funcionarios de inmigración encadenan a una persona detenida el lunes 27 de enero de 2025 en Silver Spring, Maryland. (AP Foto/Alex Brandon)

Funcionarios de inmigración encadenan a una persona detenida el lunes 27 de enero de 2025 en Silver Spring, Maryland. (AP Foto/Alex Brandon)

WASHINGTON (AP) — El gobierno del presidente Donald Trump parece haber comenzado a deportar a personas originarias de Myanmar y Vietnam a Sudán del Sur, a pesar de una orden judicial que restringe las deportaciones a otros países, afirmaron los abogados de los migrantes en documentos judiciales .

Las autoridades de inmigración podrían haber enviado hasta una docena de personas de distintos países a África, dijeron a un juez.

Estas deportaciones serían una violación a una orden judicial que establece que las personas deben recibir una “oportunidad significativa” de presentar sus argumentos de que ser enviadas a otro país que no sea el suyo sería un riesgo para su seguridad, indicaron los abogados.

La aparente deportación de un hombre de Myanmar fue confirmada en un correo electrónico de un funcionario de inmigración en Texas, según documentos judiciales. El hombre fue informado de su deportación únicamente en inglés, un idioma que no habla bien, y sus abogados se enteraron del plan horas antes de que partiera su vuelo de deportación, añadieron.

Una mujer también informó que su esposo, originario de Vietnam, y alrededor de otras 10 personas fueron trasladadas a África el martes, escribieron abogados de la Alianza Nacional de Litigios de Inmigración.

Pidieron al juez Brian E. Murphy una orden judicial de emergencia para evitar las deportaciones. Murphy, quien fue nombrado al cargo por el presidente Joe Biden, determinó anteriormente que cualquier plan para deportar personas a Libia sin previo aviso “claramente” violaría su fallo, el cual también se aplica a personas que de otro modo han agotado sus apelaciones legales. Una audiencia en el caso fue programada para el miércoles.

Ni el Departamento de Seguridad Nacional ni la Casa Blanca respondieron a mensajes enviados en busca de comentarios.

Algunos países no aceptan deportaciones de Estados Unidos, lo que ha llevado al gobierno federal a concretar acuerdos con otros países, como Panamá, para que reciban a los inmigrantes. Washington también ha enviado a inmigrantes venezolanos a una prisión de máxima seguridad en El Salvador al amparo de una ley de tiempos de guerra del siglo XVIII que ha sido impugnada en los tribunales.

Sudán del Sur ha sufrido repetidos episodios de violencia desde que se independizó de Sudán en 2011, en medio de esperanzas de que podría usar sus grandes reservas de petróleo para traer prosperidad a una región golpeada por la pobreza. Hace apenas unas semanas, el principal funcionario de la ONU en el país advirtió que los enfrentamientos entre fuerzas leales al presidente y un vicepresidente amenazaban con convertirse en una guerra civil a gran escala.

La situación es “oscuramente reminiscente a los conflictos de 2013 y 2016, los cuales cobraron más de 400,000 vidas”, dijo Nicholas Haysom, jefe de la misión de paz de la ONU, la cual cuenta con casi 20,000 efectivos.

El informe anual del Departamento de Estado sobre Sudán del Sur —publicado en abril de 2024— dice que entre los “problemas significativos de derechos humanos” se incluyen asesinatos arbitrarios, desapariciones, torturas o tratos inhumanos por parte de las fuerzas de seguridad y una extensa violencia basada en la identidad de género y sexual.

El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha otorgado Estatus de Protección Temporal a un pequeño número de sursudaneses que ya vivían en Estados Unidos desde la fundación del país en 2011, protegiéndolos de la deportación al considerar que las condiciones son demasiado inseguras en la nación africana. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem extendió recientemente esas protecciones hasta noviembre para permitir una revisión más exhaustiva.

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Los periodistas de Associated Press Rebecca Santana, Tim Sullivan y Elliot Spagat contribuyeron con este despacho.