Visitantes acarician a roedores gigantes en el Capybara Cafe de Florida

Los amantes de los animales ahora tienen un lugar para pasar el rato con los animales de moda: grandes roedores peludos.

En la parte de atrás de un edificio de oficinas inmobiliarias en la que se conoce como la ciudad más antigua de Estados Unidos, los capibaras se suben al regazo de los visitantes, mordisquean mazorcas de maíz y buscan las caricias de los humanos en The Capybara Cafe, en St. Augustine, Florida.

“Les das muchas caricias y amor”, dijo Stephanie Angel, que abrió la cafetería a finales del año pasado. “Muchas veces se suben a tu regazo porque están muy acostumbrados a la gente, y si eres realmente bueno dando caricias, en realidad se caen. Así que nuestro objetivo es siempre lograr que se sientan tan cómodos que se caigan”.

Desde que abrió sus puertas en octubre en el centro de St. Augustine, cerca del campus de Flagler College, cientos de amantes de los animales han visitado el local para acariciar las cabezas de los capibaras. Clientes como Leah Macri, quien visitó recientemente el lugar en el noreste de Florida desde Orlando con su hija, agotan las reservas con varios meses de anticipación.

“Su pelaje se siente un poco como paja”, comentó Macri.

Después de entrar a una zona de recepción con sofás y un corral abierto de pollitos, los visitantes pasan a una habitación más pequeña en grupos de seis. Tras taparse el regazo con mantas, se llevan tres capibaras a la sala. Otros animales —como un zorrillo, un wallaby y un armadillo— también entran en la habitación, y se arrastran entre los humanos y sobre sus regazos. El costo es de 49 dólares por persona para un encuentro de media hora, y de 99 para uno de una hora en el que participan los otros animales.

Aunque había venido por los capibaras, a Macri le gustó más sostener el armadillo.

”Era el más cariñoso, el mejor. Era simplemente el más suave”, declaró. “Era muy dulce”.

El capibara, un pariente semiacuático sudamericano de la cobaya, es el último de una larga lista de animales “de moda” que reciben tratamiento de estrellas en Estados Unidos. Durante la temporada de compras navideñas del año pasado, se podían encontrar pantuflas, bolsos, batas y bombas de baño de capibara. Axolotes, búhos, erizos, zorros y perezosos también han tenido su momento de atención recientemente.

Los capibaras, con patas palmeadas, pueden crecer más de 1,2 metros (cuatro pies) de largo y pesar más de 45 kilos (100 libras).

Varios zoológicos y parques de vida silvestre en Estados Unidos ofrecen encuentros con capibaras, pero Angel dice que ninguno de ellos proporciona la intimidad con los animales que se obtiene en The Capybara Cafe.

Angel señaló que planea abrir pronto otro café de este tipo en St. Petersburg, Florida. En el local de St. Augustine no vende café ni comida caliente, como cabría esperar por su nombre, pero sí cuenta con camisetas, tazas y muñecos de felpa con temática de capibara.

El café fue creado para apoyar financieramente al santuario sin fines de lucro Noah’s Ark Sanctuary Inc., con sede en Hastings, Florida, según Angel.

Chris Cooper, quien visitó The Capybara Cafe con su esposa, se sorprendió de lo áspero y grueso que era el pelo de los roedores.

“No esperaba lo afectuosos que eran”, dijo Cooper, quien condujo 253 kilómetros (157 millas) desde Weeki Wachee para ver a las criaturas. “Disfrutaron de las caricias”.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.