Autoridades estatales adquieren drones artillados para combatir el crimen en frontera sur de México
TAPACHULA, México (AP) — Las autoridades del estado de Chiapas, en el sur de México, adquirieron una flotilla de drones artillados para combatir a los grupos criminales que operan en esa región sumida en la violencia por la disputa territorial que mantienen los poderosos cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, que suelen emplear sofisticados armamentos para enfrentar a las fuerzas de seguridad.
La Secretaría de Seguridad de Chiapas anunció el martes la compra del lote de drones artillados, dos de los cuales serán entregados a la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal que estuvo implicada en un incidente diplomático luego de que algunos de sus miembros pasaron este mes a Guatemala para perseguir a presuntos narcotraficantes.
Sobre las cualidades y usos que tendrán los sofisticados armamentos, el titular de la Secretaría de Seguridad de Chiapas, Óscar Aparicio Avendaño, explicó que a los drones se les podrá cargar ametralladoras y también se emplearán en el combate a los incendios.
Además de estos equipos, el gobierno de Chiapas adquirió dos bases móviles blindadas, denominadas “Kanan”, con capacidad para albergar 24 elementos que serán desplegadas en zonas remotas.
Al asumir el gobierno en diciembre pasado, el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez, declaró un combate frontal al crimen para revertir la espiral de violencia en la que se ha sumido la región fronteriza con Guatemala por la disputa de las rutas del tráfico de drogas, armas y migrantes.
Como parte de sus políticas de seguridad Ramírez - del partido gobernante Morena - creó el grupo élite Pakal, que está integrado por exagentes de la extinta policía federal y exmilitares.
A seis meses de su conformación, ya pesan diversas denuncias contra la agrupación policial. En mayo pasado, uno de sus miembros desertó y denunció a otros compañeros de corrupción, así como presuntos vínculos con la delincuencia organizada. Lo que motivó el despido de un mando y se abrió una investigación.
El caso más reciente fue el ingreso el pasado 8 de junio de los agentes mexicanos al territorio de Guatemala con vehículos blindados y artillados durante una persecución que comenzó en México y que dejó cuatro presuntos criminales muertos.
El gobierno estatal recientemente presumió que Chiapas se posicionó como el estado más seguro del país con el menor índice de delitos de México.
Pero la estrategia ha sido cuestionada por organizaciones de la sociedad civil. El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas dijo en un reciente informe que la pacificación que proclaman las autoridades de Chiapas podría ser producto de la mayor militarización de la región y no al desmantelamiento real de los grupos criminales.