Lo que hay que saber sobre la fuerza laboral federal con Trump

Desde que el presidente Donald Trump comenzó su segundo mandato el mes pasado, se ha centrado en reducir drásticamente la fuerza laboral federal a un ritmo vertiginoso.

Desde desmantelar la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) hasta ofrecer un plan masivo de renuncia diferida, la administración republicana de Trump ha emitido órdenes ejecutivas y memorandos destinados a reconfigurar sustancialmente el tamaño del gobierno y el lugar donde trabajan sus empleados.

Muchas de las órdenes de Trump se han encontrado con obstáculos legales, dejando a algunos trabajadores confundidos sobre su futuro y la oferta de renuncia diferida o liquidación anticipada.

Aquí está lo que se debe saber sobre la fuerza laboral federal, sus protecciones laborales y el proceso de reducción de su número.

¿Cuán grande es la fuerza laboral federal y dónde se encuentran los trabajadores?

La fuerza laboral civil federal, sin incluir al personal militar y a los empleados postales, comprende aproximadamente 2,4 millones de personas.

Si bien un buen porcentaje de los burócratas federales, un 20%, se encuentra en Washington, D.C., y en los estados vecinos de Maryland y Virginia, más del 80% está distribuido fuera de la región.

¿Cuál es la diferencia entre los funcionarios civiles y los designados políticos?

Los funcionarios civiles son la gran mayoría de los trabajadores federales. Por lo general, son contratados a través de un proceso de solicitud y tienen fuertes protecciones una vez en sus puestos. Los designados políticos, que suman aproximadamente 4.000, sirven a discreción del presidente y pueden ser despedidos a voluntad por el jefe del ejecutivo.

“Los funcionarios civiles tienden a estar en sus trabajos como carreras, algunos de ellos durante décadas”, dijo Elaine Kamarck, investigadora principal en el Instituto Brookings que trabajó en la administración demócrata del presidente Bill Clinton, cuando se eliminaron alrededor de 426.000 empleos federales durante más de ocho años en un esfuerzo deliberado por reinventar el gobierno.

¿Cómo funciona el despido en el gobierno federal?

No es fácil despedir a la gran mayoría de los trabajadores federales; tienen una considerable seguridad laboral con una larga historia legal.

Los empleados federales que no son designados políticos tienen blindajes diseñados para evitar los despidos por caprichos políticos. Las protecciones han crecido con el tiempo, bajo el liderazgo de los dos principales partidos políticos.

“El presidente definitivamente tiene un gran trabajo por delante”, dijo Donald Kettl, profesor emérito y exdecano de la Escuela de Políticas Públicas de la Universidad de Maryland. Los trabajadores federales tienen derecho a un debido proceso, lo que significa que pueden impugnar acciones disciplinarias a través de un proceso formal. Deben ser notificados de las acusaciones en su contra y se les debe permitir responder y presentar su versión.

“Debes construir un expediente para despedir a alguien, y eso no suele suceder”, dijo Kamarck.

¿Cómo surgieron las protecciones para la fuerza laboral federal?

Las protecciones para los empleados federales comenzaron como una reforma al caos causado por el sistema de botines del siglo XIX, donde los empleos federales se otorgaban a los leales de un presidente. Esto llevó a la incompetencia y la corrupción, así como a una alta rotación con nuevas administraciones que resultaron disruptivas y evitaron la continuidad de la experiencia.

En 1881, el presidente James Garfield fue asesinado por un hombre que creía que Garfield le debía un trabajo después de hacer campaña por él. Eso dio paso a la Ley de Servicio Civil Pendleton de 1883, que creó un sistema basado en méritos para la contratación de empleados federales.

En 1978, el Congreso aprobó la Ley de Reforma del Servicio Civil, para proteger el sistema de méritos con derechos exigibles, de modo que la mayoría de los burócratas federales solo puedan ser despedidos por una razón legítima.

“La idea es que no vamos a conseguir a las mejores personas si sus trabajos son completamente inseguros y si van a perder su empleo cada vez que un nuevo partido asuma el poder, así que para alentar a personas de calidad a postularse para el servicio gubernamental, proporcionamos ciertas garantías”, explicó David Super, profesor especializado en derecho administrativo en la Facultad de Derecho de Georgetown.

Ningún otro líder de Estados Unidos ha intentado recortes tan amplios y dramáticos como los que Trump desea, señaló Max Stier, presidente y director ejecutivo de Partnership for Public Service, una organización no partidista y sin fines de lucro centrada en mejorar el gobierno.

“No hay nada en nuestra historia que se haya aproximado a lo que estamos viendo ahora”, destacó Stier.

¿Cómo funcionan los sindicatos de empleados federales?

Los trabajadores federales tienen representación sindical, pero, a diferencia de los de muchas industrias, no pueden hacer huelga. Tampoco pueden negociar sobre salarios, ya que estos están establecidos por ley.

Los sindicatos federales pueden negociar sobre las condiciones laborales y las protecciones básicas para sus miembros. Recientemente, los sindicatos han luchado por las condiciones de trabajo remoto, que han negociado con éxito en el pasado y que Trump busca reducir drásticamente.

“También hay algunos límites sobre lo que pueden negociar, así que, por ejemplo, no pueden negociar sobre cuál es la política de su agencia”, explicó Super. “Eso es un asunto que debe resolverse en el proceso político, pero pueden negociar sobre cosas que afectan a los trabajadores en sus empleos y su bienestar”.

¿Qué sucede durante el período de prueba de un empleado federal?

Los empleados federales tienen diferentes períodos de prueba, a menudo de uno o dos años, durante los cuales realizan tareas bajo un supervisor, quien evalúa si el empleado está desempeñando su trabajo con éxito. Si no, los trabajadores pueden ser despedidos; si es así, se les contrata como empleados a tiempo completo con protecciones.

Los empleados en período de prueba no tienen los mismos derechos de apelación; es un proceso más fácil despedirlos.

¿Qué piensa la gente sobre los esfuerzos para reducir la fuerza laboral federal?

Una encuesta del Centro de Investigación de Asuntos Públicos AP-NORC realizada en enero encontró que reducir la fuerza laboral federal —ya sea a través de recortes de empleos o eliminando agencias enteras— tiene más oposición que apoyo, aunque una parte significativa de los estadounidenses aún no había desarrollado una opinión.

Solo 3 de cada 10 adultos en Estados Unidos dijeron que “apoyaban firmemente” o “algo” la eliminación de un gran número de empleos federales, según la encuesta de AP-NORC, mientras que 4 de cada 10 estaban “algo” o “firmemente” en contra y 3 de cada 10 tenían una opinión neutral. Casi el doble de encuestados se oponía más a los recortes en agencias que a apoyarlos; una cuarta parte apoyaba la eliminación de agencias; casi la mitad estaba en contra y alrededor de 3 de cada 10 no tenían una opinión.

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El periodista de The Associated Press Matthew Perrone y la editora de sondeos Amelia Thomson-DeVeaux contribuyeron a este reporte.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.