Anisimova agradece a su madre entre lágrimas tras derrota en final de Wimbledon
Amanda Anisimova de EE. UU. reacciona tras perder el partido final individual femenino contra Iga Swiatek de Polonia en el Campeonato de Tenis de Wimbledon en Londres, el sábado 12 de julio de 2025. (AP Photo/Kirsty Wigglesworth)
LONDRES (AP) — Amanda Anisimova no dejaba de disculparse con los espectadores en la Pista Central, por su actuación en la derrota 6-0, 6-0 ante Iga Swiatek en la final de Wimbledon y por las emociones que le dificultaron dar un discurso después.
A pesar de todo, Anisimova, una estadounidense de 23 años en su primer partido por un título importante, se aseguró de agradecer a su madre por hacer un viaje poco común para verla jugar en persona.
“Mi mamá es la persona más desinteresada que conozco, y ha hecho todo para llevarme a este punto en mi vida”, señaló Anisimova. Su padre falleció en 2019 cuando ella tenía 17 años.
Luego, dirigiéndose a su madre, Anisimova continuó mientras sus ojos se llenaban de lágrimas: “Así que gracias por estar aquí y romper la superstición de volar”.
“Estoy tan feliz de poder compartir este momento y que estés aquí para presenciarlo en persona. Sé que ya no puedes verme jugar en vivo tanto, porque haces mucho por mi hermana y por mí, y siempre lo has hecho”, expresó Anisimova. “Te quiero mucho”.
El simple hecho de participar en una final de Grand Slam, después de eliminar a Aryna Sabalenka, número 1 del ranking, en las semifinales, representó un gran éxito para Anisimova, una joven de 23 años que nació en Nueva Jersey y creció en Florida desde los tres años.
Fue una jugadora destacada en su adolescencia, venciendo a Coco Gauff en la final juvenil del Abierto de Estados Unidos en 2017, y rápidamente dejó su huella como profesional al llegar a los cuartos de final del Abierto de Francia dos años después.
En mayo de 2023, anunció que se tomaría un descanso de salud mental del circuito debido al agotamiento.
Anisimova regresó a la acción en 2024, pero su ranking de 189º hace solo 12 meses era demasiado bajo para entrar automáticamente en el torneo de un evento como Wimbledon, por lo que intentó sin éxito calificar para el torneo.
“No importa lo que haya pasado hoy”, le dijo Swiatek, “deberías estar orgullosa del trabajo que estás haciendo”.
El sábado, se convirtió en la segunda mujer en la era Abierta, que comenzó en 1968, en llegar a una final de Grand Slam un año después de perder en la clasificación. Y ahora entrará en el top diez por primera vez.
Después del partido, le dijo a su equipo que les agradece por “simplemente cuidarme” durante “todo el viaje que ha sido, todo este último año”.
“Sé que hoy no tuve suficiente, pero voy a seguir trabajando”, manifestó Anisimova. “Y siempre creo en mí misma, así que espero volver aquí algún día”.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.