México apuesta a llegar en agosto a un acuerdo con EEUU sobre los nuevos aranceles

Un camión cargado con productos de México y Canadá pasa por Pharr, Texas, el 4 de marzo de 2025. (Foto AP/Eric Gay, Archivo)

Un camión cargado con productos de México y Canadá pasa por Pharr, Texas, el 4 de marzo de 2025. (Foto AP/Eric Gay, Archivo)

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum afirmó el lunes que espera llegar en agosto a un acuerdo con Washington sobre el arancel general a productos de su país de un 30% que ha suscitado nuevas tensiones en las relaciones entre México y Estados Unidos.

Ante la nueva tarifa que anunció el sábado el presidente estadounidense Donald Trump —que se aplicará a partir de agosto a las importaciones mexicanas—, Sheinbaum se mostró confiada en que llegarán a buen término las negociaciones que viene adelantando su gobierno con Washington desde hace varias semanas para un “acuerdo global” que incluye asuntos comerciales, de seguridad y migración.

México y Estados Unidos mantienen una estrecha relación comercial, que se sitúa en torno a los 840.000 millones de dólares anuales y que no se ha visto afectada por las recurrentes amenazas que ha lanzado Trump desde que inició su segundo mandato en enero pasado.

Durante su conferencia matutina, la mandataria señaló que su gobierno está trabajando para evitar que el arancel del 30% “dañe la economía mexicana y sobre todo los empleos” y ratificó que se seguirá trabajando para “llegar a un acuerdo al 1 de agosto”.

“Esperamos que con estas mesas (de negociaciones) podamos llegar a un acuerdo y si no se llega pues ya habrá otras decisiones”, indicó Sheinbaum sin ofrecer detalles.

Al ser preguntada sobre los productos que se verían afectados por la nueva tarifa del 30% la presidenta dijo que ese asunto se está revisando, pero recordó que en marzo ya se había acordado que los productos cubiertos por el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) quedarían exentos de tributos y que solo aplicaría un arancel general de 25% a los bienes no incluidos en el convenio.

Estados Unidos también impuso en meses pasados un arancel de 50% al acero, el aluminio y el cobre y un gravamen del 17% para el tomate mexicano que entró en vigor este lunes.

Sobre el impuesto al tomate, Sheinbaum informó que las autoridades mexicanas están trabajando de cerca con los productores para que “haya los menores efectos”.

Por la tarde, la Secretaría de Economía calificó en un comunicado que la nueva cuota al tomate mexicano es “injusta” y va en contra de los intereses de productores de ambos países pero dijo que seguirán negociando para buscar un acuerdo.

“Es muy difícil que se deje de exportar jitomate de México a Estados Unidos porque no le alcanza a Estados Unidos con su producción nacional para poder cubrir toda su demanda”, agregó la presidenta.

Estados Unidos acusa a México de vender sus tomates por debajo de sus costos, algo que el gobierno niega. En abril, anunció su retiro de un acuerdo bilateral y que a partir del 14 de julio se aplicaría una cuota extra de casi 21% a las importaciones de tomate mexicano. Semanas después Washington decidió bajar el impuesto al 17%.

México es el principal exportador de tomate a Estados Unidos. Dos de cada tres tomates consumidos en el vecino del norte son mexicanos. Los especialistas estiman que la nueva tarifa podría implicar para la economía estadounidense un impacto de alrededor de 8.000 millones de dólares.