Perú traslada a cárcel remota a reos ligados a atentado contra fiscalía y secuestros

LIMA (AP) — Perú trasladó el miércoles a cinco reos “extremadamente peligrosos” a una cárcel de máxima seguridad en los Andes, a más de 5.000 metros de altitud, porque buscaban reintegrarse a sus clanes, relacionados con secuestros y con un atentado con explosivos contra una sede de la fiscalía.

Javier Llaque, jefe del Instituto Nacional Penitenciario de Perú (INPE), dijo a The Associated Press que por información de inteligencia policial se supo que los presos “pretendían reorganizarse” desde una cárcel en Trujillo, una ciudad norteña donde, según los expertos, aparecieron las primeras bandas extorsivas hace casi dos décadas hasta que el fenómeno delictivo se trasladó en los últimos años al resto del país, incluida Lima.

Cuatro reos son miembros de “Los Pulpos”, una banda peruana que surgió en Trujillo en la década de 1990 y extendió sus operaciones incluso hasta la región metropolitana de Chile, según la policía. Los presos están relacionados con el secuestro de empresarios a quienes mutilaban los dedos u orejas para presionar a sus familiares a pagar los rescates. También están ligados con un atentado en enero contra la sede del Ministerio Público de Trujillo.

Los presos llegaron desde Trujillo y fueron presentados a la prensa en los exteriores de una cárcel de Lima, con las manos y pies encadenados, mientras eran conducidos por un agente que los tenía agarrados de la parte posterior del cuello. Luego siguieron su camino en un autobús con ventanas diminutas y enrejadas hacia la remota cárcel de Challapalca, a 5.050 metros sobre el nivel del mar en el extremo sur de Perú.

La decisión ocurre luego de que la presidenta Dina Boluarte dijo el viernes que aplicaría “mano dura” contra la criminalidad, que ha colocado en aprietos a su gestión provocando la renuncia de su ministro del Interior, protestas contra el gobierno y una restricción de derechos constitucionales en Lima por 30 días.

En Challapalca están recluidos reos venezolanos, miembros de las bandas “Dinastía Alayón”, “Los hijos de Dios” y “Los Gallegos”, tres brazos locales asociados a la banda transnacional venezolana Tren de Aragua, según la policía. En esa cárcel los presos tienen un régimen de entre dos y cuatro horas de salidas diarias al patio y reciben visitas de sus familiares directos dos veces por mes.

La cárcel de Challapalca alberga a 180 reos, pero el gobierno afirma que tiene capacidad para 220. Fue construida en la década de 1990 para albergar a miembros del grupo terrorista Sendero Luminoso que pretendían tomar el poder mediante la violencia y se enfrentaron entre 1980 y 2000 a las fuerzas de seguridad, lo que desató de ambas partes un baño de sangre que dejó más de 69.000 víctimas.