Trump se sienta junto a la jaula de la UFC en Miami en una nueva aparición en un evento deportivo

MIAMI (AP) — El presidente Donald Trump dijo que la ovación de pie y los vítores que recibió al tomar asiento en un evento de UFC en Florida eran señales de que “estamos haciendo un buen trabajo”.

Trump estrechó las manos de algunos simpatizantes mientras caminaba hacia su asiento junto a la jaula el sábado por la noche en el Kaseya Center de Miami, mientras otros agitaban su característica gorra roja de campaña. El presidente republicano, que permaneció en el lugar varias horas antes de volar de regreso a su hogar en Palm Beach, dijo que era un “gran honor” recibir ese reconocimiento de la multitud.

“Dice que estamos haciendo un buen trabajo. Si no estuviéramos haciendo un buen trabajo, recibiríamos lo contrario”, dijo a los periodistas que lo acompañaban a bordo del Air Force One.

En los casi tres meses desde que regresó al cargo, Trump ha lanzado un amplio esfuerzo liderado por el multimillonario Elon Musk para reducir el gobierno despidiendo a miles de trabajadores y recortando gastos, ha intentado sin éxito hasta ahora poner fin a la guerra de Rusia contra Ucrania e imponer aranceles a muchos países, incluidos aliados cercanos de Estados Unidos.

Los demócratas, e incluso algunos simpatizantes de Trump, han criticado sus acciones iniciales.

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Pero en la UFC, fue una noche centrada en los luchadores en la jaula.

“Cada uno de ellos se acercó al final, y fueron geniales”, dijo Trump. “Quiero decir, son todos guerreros, guerreros modernos” .

En un momento, el luchador Dominick Reyes se acercó al lado del octágono después de ganar su combate y reconoció a Trump. Reyes fue a tomarse una foto con el presidente después de la entrevista posterior a la pelea.

La nieta de Trump, Kai Trump, quien asistió al UFC 314 con él, dijo que fue “increíble”.

El presidente observó cómo el australiano Alexander Volkanovski ganó su décima pelea de campeonato consecutiva, derrotando al brasileño Diego Lopes la madrugada del domingo en una decisión unánime en el combate de peso pluma.

Trump es un fanático de UFC desde hace mucho tiempo y un entusiasta de los deportes, que ha asistido frecuentemente a combates importantes y ha tenido una larga amistad con Dana White, presidente y director general de la UFC.

Fue la primera visita de Trump a la UFC desde que regresó a la Casa Blanca en enero y se produjo semanas después de que asistiera al torneo de golf LIV patrocinado por Arabia Saudí en su club de golf en Miami.

Trump asistió al Super Bowl y al Daytona 500, ambos en febrero. Se sentó al lado de la jaula en una pelea de campeonato de la UFC en la ciudad de Nueva York en noviembre, poco después de ganar las elecciones. La estrecha afiliación de Trump con la UFC ayudó a impulsar su campaña entre los votantes jóvenes masculinos.

Cuando el presidente entró al recinto de Miami acompañado por White, compartió un abrazo con el presentador de podcast Joe Rogan. Musk y Rogan se sentaron al lado de Trump.

En el evento también estuvieron varios miembros de su gobierno, incluidos el secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr.; el director del FBI, Kash Patel; la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, y el secretario de Estado, Marco Rubio.

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Superville informó desde West Palm Beach, Florida.